Al norte por la verdad

En un contexto donde la guerra de Ucrania era apenas una preocupación cierta para los servicios secretos de los Estados Unidos, consensuamos con la Universidad Complutense de Madrid la necesidad de poner en marcha un movimiento social que defendiera la verdad como base de nuestro sistema democrático, la verdad como sustento elemental del proyecto europeo. En definitiva, un movimiento social que propugnara una Europa, de verdad.
Director del proyecto
Xurxo Torres
Coordinadores RSC
Nieves Barousse | Jorge Ramírez
Editora
Georgina Leibovich
Equipo UCM
Javier Sierra, Delegado del Rector para la Comunicación | Margot Almazán, Directora Gabinete Comunicación
Equipo de investigación
Lidia Fraile | Yaiza Ejapa | Paula Mallén | Marta Valcarce
Escucha social
Laura Vázquez | Sara Collazo
Análisis demoscópico
María Cuadrado | Gabriel Bolaño
Logística
Bárbara Navarro | Marta Muñoz
Diseño y maquetación
Tropical Estudio
Ilustraciones
Sergio Palao
Gestión digital
Georgy Fedotov | Santiago Domínguez | Josymar Guzmán

Una investigación del proyecto Europa, de verdad

Al norte por la verdad

En un contexto donde la guerra de Ucrania era apenas una preocupación cierta para los servicios secretos de los Estados Unidos, consensuamos con la Universidad Complutense de Madrid la necesidad de poner en marcha un movimiento social que defendiera la verdad como base de nuestro sistema democrático, la verdad como sustento elemental del proyecto europeo. En definitiva, un movimiento social que propugnara una Europa, de verdad.
Director del proyecto
Xurxo Torres
Coordinadores RSC
Nieves Barousse | Jorge Ramírez
Editora
Georgina Leibovich
Equipo UCM
Javier Sierra, Delegado del Rector para la Comunicación | Margot Almazán, Directora Gabinete Comunicación
Equipo de investigación
Lidia Fraile | Yaiza Ejapa | Paula Mallén | Marta Valcarce
Escucha social
Laura Vázquez | Sara Collazo
Análisis demoscópico
María Cuadrado | Gabriel Bolaño
Logística
Bárbara Navarro | Marta Muñoz
Diseño y maquetación
Tropical Estudio
Ilustraciones
Sergio Palao
Gestión digital
Georgy Fedotov | Santiago Domínguez | Josymar Guzmán

Una investigación del proyecto Europa, de verdad

Un mes de compromiso y rabia

Descarga ‘Al norte por la verdad’

Un mes de compromiso y rabia

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I. Escucha
social

En la inmediatez de la guerra necesitábamos una ventana para ver más allá del relato bélico. Algo que nos acercara a las conversaciones entre aguas: a lo que discurre entre la superficie y la profundidad. Entendimos que era clave analizar qué se estaba diciendo en redes sociales, cómo evolucionaban esas conversaciones, qué veracidad tenían sus creadores. Interpretamos la escucha social como una sesión de psicoanálisis a la sociedad directamente implicada en el conflicto. Y ahí nos encontramos con que era tan importante lo que se decía como lo que se callaba. O más aún, los patrones argumentales que se repetían casi sin importar su procedencia. La verdad en las redes sobre el conflicto de Ucrania se esconde detrás de una maraña de mentiras y de un ejército de perfiles falsos.

I. Escucha
social

En la inmediatez de la guerra necesitábamos una ventana para ver más allá del relato bélico. Algo que nos acercara a las conversaciones entre aguas: a lo que discurre entre la superficie y la profundidad. Entendimos que era clave analizar qué se estaba diciendo en redes sociales, cómo evolucionaban esas conversaciones, qué veracidad tenían sus creadores. Interpretamos la escucha social como una sesión de psicoanálisis a la sociedad directamente implicada en el conflicto. Y ahí nos encontramos con que era tan importante lo que se decía como lo que se callaba. O más aún, los patrones argumentales que se repetían casi sin importar su procedencia. La verdad en las redes sobre el conflicto de Ucrania se esconde detrás de una maraña de mentiras y de un ejército de perfiles falsos.

Primera escucha Análisis de perfiles fake
Primera escucha Análisis de perfiles fake
Periodo de escucha:
del 24 de febrero hasta el 3 de marzo.
Redes analizadas:
Twitter, Facebook y la rusa VK.
Idiomas rastreados:
inglés, ruso, ucraniano, español, francés, alemán, polaco y rumano.
Base de la muestra:
Twitter 141.790
Facebook: 47.298 (perfiles públicos con geolocalización activada)
VK: 3.815.
Número total de posts analizados:
1.639.534 posts.
Fuente: CYABRA.

La primera escucha social se realiza sobre perfiles que tienen activada la geolocalización en sus redes sociales. Este criterio se emplea para determinar si las conversaciones generadas por la invasión rusa de Ucrania varían según la cercanía territorial al conflicto. Los países sobre los que se aplica la escucha son: Rusia, Ucrania, Polonia, Rumania, Alemania, Francia y España. De manera general, lo primero que llama la atención es el volumen de perfiles falsos que interactúan en las conversaciones: casi un 30% en Facebook y casi un 10% en Twitter.
Base: 141.790
Perfiles falsos: 12.879 (9%)
Perfiles verdaderos: 128.911 (91%)
Base: 47.298
Perfiles falsos: 13.400 (28%)
Perfiles verdaderos: 33.898 (72%)
La escucha en Rusia se realiza en su red social VK.
Base: 3.815
Perfiles falsos: 173 (5%)
Perfiles verdaderos: 3.642 (95%)
Las primeras reacciones muestran que los rusos están preocupados por las sanciones, pero también se observan importantes corrientes que legitiman la intervención y llaman a ser leales a la política de Rusia y con Putin. En menor medida, pero reseñables, son los comentarios críticos con las medidas establecidas por el gobierno que limitan la libertad de expresión. Alrededor del 1 de marzo se produce un momento álgido en la conversación sobre Rusia y Ucrania. En ese momento, se anuncian las primeras sanciones económicas de la UE hacia Rusia y se incorpora el debate sobre si cerrar el espacio aéreo ucraniano como solicita el presidente Zelenski.

La conversación dominante es de marcado cariz patriótico. Los ucranianos se movilizan en redes para llamar a la resistencia. Por debajo de este primer nivel de conversación se observa una doble argumentación. Hacia los rusos, apelando a las relaciones históricas entre ambos países para frenar la invasión. Hacia occidente, solicitando una respuesta contundente por parte de la OTAN y de la UE. En paralelo a este relato también se observa mucha actividad de perfiles pro-rusos (la mayoría falsos) justificando la decisión de Putin.

Las conversaciones se centran en la cercanía del conflicto a sus fronteras y la situación generada por la guerra respecto a los refugiados.
También existe una crítica generalizada por la falta de apoyo de la OTAN. Los polacos expresan su deseo de ayudar a ucrania cerrando su espacio aéreo. Se detecta una pequeña pero significativa campaña de desinformación entre un grupo de perfiles falsos que coordinan y amplifican las publicaciones positivas a favor de Putin.

El pico de conversación social se produce en 24 de febrero.

Las conversaciones en este país, también fronterizo con Ucrania, no son tan beligerantes como las observadas en Polonia. En Rumanía se incide más en la necesidad de parar la guerra y buscar una salida diplomática al conflicto.
Esta postura, más retranqueada que la polaca, también se observa en un menor volumen e implicación emocional con los refugiados.

En Alemania convive la solidaridad con los refugiados y el rechazo a la guerra con el pragmatismo de su relación económica y dependencia energética de Rusia. A los alemanes les preocupa mucho una posible escalada del conflicto. En el ámbito de la respuesta, se muestran más proclives a las sanciones de la UE que a una mayor implicación de la OTAN. En este país, también se ha detectado un volumen relevante de usuarios falsos generadores de contenidos favorables a Putin que legitiman su acción por agravios objetivos contra Rusia.

El protagonismo alcanzado por macron en el conflicto ocupa el espacio central de las conversaciones en Francia. Por una parte, se defiende su proactividad y su papel en la rapidez y eficacia de las sanciones adoptadas por la UE. Pero por otra, también se señala que Macron está aprovechando el conflicto para desviar la
atención pública de las controvertidas políticas internas sobre el Covid. También se observa una corriente que legitima la decisión de Putin de invadir Ucrania.

En términos de flujo de conversación, la curva crece cuando se produce la invasión (24 de febrero), cae durante tres días y vuelve a experimentar un repunte el 2 de marzo, cuando Macron pronuncia un discurso en el que señala que “Francia no está en guerra con Rusia”.
El análisis de las conexiones entre perfiles mostró diferentes tipos de comunidades que generan diferentes tipos de narrativas en torno al conflicto. La primera comunidad debate la reacción de la unión europea en torno al conflicto, qué tipo de reacción debería adoptar la
UE hacia Rusia, especialmente en lo que respecta a Francia. La segunda comunidad tiene una narrativa sobre el impacto de la sanción a Rusia sobre Francia, cuáles son los riesgos que el mundo corre al hacerlo como ciberataque, guerra nuclear, etc. La tercera comunidad está más preocupada por la legitimidad de la guerra, si está bien o mal.

Lo que se detecta en España en la primera semana de contienda es un gran volumen de hashtags y frases llamando al fin de la guerra. También se identifica una preocupación por la escalada bélica. De hecho, el término “tercera guerra mundial” ocupa un lugar destacado. Con todo, del análisis de las conversaciones también se encuentra una voluntad por parte de la sociedad que insta a la unión europea y a la OTAN a hacer más. Llama la atención el paralelismo que se observa en los flujos referidos a Putin y a la OTAN que evidencian una significativa base de apoyo al primero, sobre todo al inicio del conflicto, y una meseta dominantemente neutra en las conversaciones generadas en torno a la alianza atlántica.

Periodo de escucha:
del 24 de febrero hasta el 3 de marzo.
Redes analizadas:
Twitter, Facebook y la rusa VK.
Idiomas rastreados:
inglés, ruso, ucraniano, español, francés, alemán, polaco y rumano.
Base de la muestra:
Twitter 141.790
Facebook: 47.298 (perfiles públicos con geolocalización activada)
VK: 3.815.
Número total de posts analizados:
1.639.534 posts.
Fuente: CYABRA.

La primera escucha social se realiza sobre perfiles que tienen activada la geolocalización en sus redes sociales. Este criterio se emplea para determinar si las conversaciones generadas por la invasión rusa de Ucrania varían según la cercanía territorial al conflicto. Los países sobre los que se aplica la escucha son: Rusia, Ucrania, Polonia, Rumania, Alemania, Francia y España. De manera general, lo primero que llama la atención es el volumen de perfiles falsos que interactúan en las conversaciones: casi un 30% en Facebook y casi un 10% en Twitter.
Segunda escucha Análisis de perfiles fake
Segunda escucha Análisis de perfiles fake

Periodo de escucha:
del 31 de marzo hasta el 7 de abril.
Redes analizadas:
Twitter y Facebook.
Idiomas rastreados:
inglés, ruso, ucraniano y español.
Base de la muestra:
Twitter: 27.133
Facebook: 9.773 (perfiles públicos sin geolocalización)
Fuente:
CYABRA.

Base: 27.133 perfiles falsos: 1.899 (7%)
Perfiles verdaderos: 25.224 (93%)
Se analizan las conexiones entre los perfiles auténticos y no auténticos para identificar campañas falsas orquestadas. Los perfiles se dividen en auténticos (color blanco) y falsos (color negro). El tamaño de los grupos de la imagen muestra el número de conexiones de los perfiles y se agrupan en función de un comportamiento similar (misma foto de perfil, creada el mismo día, etc).

Las conversaciones están muy centradas en la masacre de Bucha, tienen una clara orientación a favor de ucrania y de denuncia contra Rusia y Putin. Se detecta una comunidad de 55 perfiles de Twitter, el 90% de ellos falsos, que difunden este tipo de contenidos. Además, se identifica un perfil falso con comportamiento de bot. Este perfil publica el mismo comentario 113 veces. Difunde lo que está sucediendo en Bucha con hashtag #stopbusinessinrussia.

Base: 9.773
Perfiles falsos: 1.834 (18,8%)
Perfiles verdaderos: 6.280 (64,3%)
Con el mismo criterio empleado en Twitter, el volumen e interacción de los perfiles falsos en Facebook se traduce en la siguiente representación gráfica:

Se encuentra una comunidad de perfiles falsos que comparten un comportamiento similar y difunden contenido prorruso. Parten de un postulado neutro: la guerra es algo negativo, pero evolucionan a posiciones que justifican la agresión: Rusia sólo se está defendiendo.
Además, estos mismos perfiles afirman que los cuerpos encontrados en Bucha no son reales sino un montaje creado por la CIA.
Se detecta una comunidad de 135 perfiles de Facebook, el 81% falsos, que culpan a los Estados Unidos de América por tener una agenda personal contra Putin y de ser los verdaderos causantes de la guerra. Se identifican hasta tres perfiles bot replicando exponencialmente estas líneas argumentales.

Periodo de escucha:
del 31 de marzo hasta el 7 de abril.
Redes analizadas:
Twitter y Facebook.
Idiomas rastreados:
inglés, ruso, ucraniano y español.
Base de la muestra:
Twitter: 27.133
Facebook: 9.773 (perfiles públicos sin geolocalización)
Fuente:
CYABRA.

Durante marzo de 2022, el Eurobarómetro realiza distintas muestras en países de la UE para sondear la opinión de los ciudadanos europeos. En términos de análisis se rastrearon cuatro países que replicaban en parte la territorialidad analizada en la escucha geolocalizada de redes sociales.

II. Base
social

II. Base
social

Durante marzo de 2022, el Eurobarómetro realiza distintas muestras en países de la UE para sondear la opinión de los ciudadanos europeos. En términos de análisis se rastrearon cuatro países que replicaban en parte la territorialidad analizada en la escucha geolocalizada de redes sociales.

Distintos países de la UE muestran una posición netamente positiva respecto a la acogida de los desplazados ucranianos.

Gráfico: Apoyo a la acogida de refugiados

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

La guerra y sus consecuencias preocupan a una parte mayoritaria de la sociedad europea.

Gráfico: Preocupación por la guerra

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

Las encuestas muestran un apoyo mayoritario a las sanciones, aunque existen excepciones. En Polonia, según el IPSOS, el porcentaje de la población que está a favor de las sanciones impuestas a Rusia es del 75%.

Gráfico: Aprobación sanciones a Rusia

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

Los encuestados parecen poco dispuestos a sufrir en sus bolsillos las consecuencias de prohibir la importación de petróleo y gas ruso. En España, según el CIS, el porcentaje de la población que piensa que la invasión rusa tendrá consecuencias económicas es del 97,2%.

Gráfico: No están dispuestos a asumir más coste de vida

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

La opinión de los encuestados respecto a la adhesión de ucrania a la UE es bastante dispar. El gráfico recoge el porcentaje de apoyo que recibe esta iniciativa.  

Gráfico: Apoyan la adhesión de Ucrania a la UE

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

La posible adhesión de ucrania a la OTAN suscita más apoyos que rechazo, excepto en Francia.

Gráfico: Apoyan la adhesión de Ucrania a la OTAN

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

El nivel de afinidad con las decisiones adoptadas por los gobiernos de cada país es, en general, bastante elevado, salvo en Francia.  

Gráfico: Satisfacción con su gobierno

Fuente extracción de datos: Eurobarómetro, marzo 2022

Análisis del eurobarómetro

Periodo de rastreo: marzo 2022
Países rastreados: Polonia, Alemania, Francia y España.
Fuente: Eurobarómetro UE.

Introducción

Como suele ser habitual, la respuesta demoscópica muestra una mayor coherencia argumental que la aportada por la escucha de conversaciones social media, pero también arroja muestras de respuestas ajustadas a lo considerado políticamente correcto. Por encima de estas consideraciones de detalle, lo que se observa en términos generales es: el compromiso inequívoco de la sociedad polaca con ucrania, el complejo equilibrio que se observa en Alemania entre solidaridad y realismo político-económico, y finalmente, la inestabilidad política manifiesta que se observa en Francia. En el caso de España, se mueve entre una solidaridad notable, la preocupación lejana por la guerra y un alto grado de adhesión con las medidas adoptadas por el gobierno en este tema.

Análisis del eurobarómetro

Periodo de rastreo: marzo 2022
Países rastreados: Polonia, Alemania, Francia y España.
Fuente: Eurobarómetro UE.

Introducción

Como suele ser habitual, la respuesta demoscópica muestra una mayor coherencia argumental que la aportada por la escucha de conversaciones social media, pero también arroja muestras de respuestas ajustadas a lo considerado políticamente correcto. Por encima de estas consideraciones de detalle, lo que se observa en términos generales es: el compromiso inequívoco de la sociedad polaca con ucrania, el complejo equilibrio que se observa en Alemania entre solidaridad y realismo político-económico, y finalmente, la inestabilidad política manifiesta que se observa en Francia. En el caso de España, se mueve entre una solidaridad notable, la preocupación lejana por la guerra y un alto grado de adhesión con las medidas adoptadas por el gobierno en este tema.

III. Mirada
crítica

Los mapas se enriquecen con los contenidos que albergan sus fronteras, esos mismos contenidos que muchas veces contribuyen a diluirlas. Teníamos un mapa de escucha social. Teníamos un mapa demoscópico. Faltaba un mapa: el de la opinión de ciudadanos europeos con historias con las que enriquecer el relato com.n de este viaje. A través de estos profesionales de ámbitos, como la comunicación, la política o la economía, profundizamos en las divergencias y en los puntos de encuentro.

III. Mirada
crítica

Los mapas se enriquecen con los contenidos que albergan sus fronteras, esos mismos contenidos que muchas veces contribuyen a diluirlas. Teníamos un mapa de escucha social. Teníamos un mapa demoscópico. Faltaba un mapa: el de la opinión de ciudadanos europeos con historias con las que enriquecer el relato com.n de este viaje. A través de estos profesionales de ámbitos, como la comunicación, la política o la economía, profundizamos en las divergencias y en los puntos de encuentro.

El viaje a las fronteras de Polonia con Ucrania se planteó como un complemento de factor humano a todo el bagaje de datos aportado por las escuchas en redes y por el análisis de los estudios demoscópicos. Entendimos que el relato de #AlNortePorLaVerdad estaba incompleto sin la visión en primera persona de lo que estaba sucediendo en esa franja de tierra donde se encontraba la desesperación de los que huyan de la guerra y el compromiso de miles de voluntarios llegados de toda Europa.

IV. Tomando
tierra

escultura





















Compromiso y
rabia

Xurxo Torres

El centro de Madrid está a más de 3.000 kilómetros del paso fronteriza de Medyka en Polonia. Es una distancia física. Es una distancia mental. Sobre todo, es un recordatorio de lo esquinados que estamos física y mentalmente del proyecto europeo. Y aún así, el sentimiento europeísta es muy fuerte en nuestro país.

Aún así, desde el pasado 24 de febrero hemos sentido como propio el conflicto ucraniano. Cientos de españoles cogieron sus coches en esos primeros d.as de invasión y se hicieron sin pestañear m.s de 6.000 kilómetros de un ida y vuelta de compromiso y rabia.

Recuerdo que el lunes 28 de febrero escribimos a 18 empresas de comunicación de Ucrania. Mostrábamos solidaridad, ofrecíamos ayuda, compartíamos dolor. De las 18, respondió una: Mainstream. Agradecían el contacto, nos decían que estaban refugiados o desplazándose hacia puntos seguros. Se despedían con el deseo de conocernos, una vez expulsados los invasores rusos. Cuando en el resto de Europa contábamos los d.as que faltaban para la capitulación, ellos vislumbraban el futuro postbélico desde la victoria. Ucranianos valientes.

Supongo que ese fue el último detonador que precisábamos para activar esta investigación sobre el impacto de la guerra en el consciente y en el inconsciente colectivo de Europa. Desde la experiencia que atesoramos con la UCM en materia de colaboraciones científicas, sentamos la base de un nuevo trabajo social enriquecido con múltiples fuentes. Desde los algoritmos de las redes a los errores muestrales de las encuestas, desde el activismo social al contraste de diversos pensamientos críticos, desde la distancia telemática a la sensación de las carreteras nevadas transitadas por refugiados y voluntarios.

La suma de todos estos elementos ha contribuido a construir este relato y, más aún, nos ha hecho ver que 3.000 kilómetros es poca distancia para avanzar en la defensa de la verdad, de la libertad y la democracia.

Pasó el mes. La guerra sigue. Como nuestro compromiso y, aunque no resulte gratificante, nuestra rabia.

Compromiso y
rabia

Xurxo Torres

El centro de Madrid está a más de 3.000 kilómetros del paso fronteriza de Medyka en Polonia. Es una distancia física. Es una distancia mental. Sobre todo, es un recordatorio de lo esquinados que estamos física y mentalmente del proyecto europeo. Y aún así, el sentimiento europeísta es muy fuerte en nuestro país.

Aún así, desde el pasado 24 de febrero hemos sentido como propio el conflicto ucraniano. Cientos de españoles cogieron sus coches en esos primeros d.as de invasión y se hicieron sin pestañear m.s de 6.000 kilómetros de un ida y vuelta de compromiso y rabia.

Recuerdo que el lunes 28 de febrero escribimos a 18 empresas de comunicación de Ucrania. Mostrábamos solidaridad, ofrecíamos ayuda, compartíamos dolor. De las 18, respondió una: Mainstream. Agradecían el contacto, nos decían que estaban refugiados o desplazándose hacia puntos seguros. Se despedían con el deseo de conocernos, una vez expulsados los invasores rusos. Cuando en el resto de Europa contábamos los d.as que faltaban para la capitulación, ellos vislumbraban el futuro postbélico desde la victoria. Ucranianos valientes.

Supongo que ese fue el último detonador que precisábamos para activar esta investigación sobre el impacto de la guerra en el consciente y en el inconsciente colectivo de Europa. Desde la experiencia que atesoramos con la UCM en materia de colaboraciones científicas, sentamos la base de un nuevo trabajo social enriquecido con múltiples fuentes. Desde los algoritmos de las redes a los errores muestrales de las encuestas, desde el activismo social al contraste de diversos pensamientos críticos, desde la distancia telemática a la sensación de las carreteras nevadas transitadas por refugiados y voluntarios.

La suma de todos estos elementos ha contribuido a construir este relato y, más aún, nos ha hecho ver que 3.000 kilómetros es poca distancia para avanzar en la defensa de la verdad, de la libertad y la democracia.

Pasó el mes. La guerra sigue. Como nuestro compromiso y, aunque no resulte gratificante, nuestra rabia.